«Mi laminadora en terapia intensiva»… Desarmando y limpiando la laminadora, parte 1

¡¡¡Hola!!!

Hace como una semana tuve una fuerte producción de mercancía porque se acercaba un bazar y debía tener muchísimas cosas, y creo que me excedí usando mi laminadora (pasta machine, máquina de pasta)… y la pobre decidió dejarme en la calle muriendo de manera intempestiva 😛

Comenzó a fallar y como tenía tanto trabajo pendiente, decidí ignorar el problema y seguirla usando. Hasta que ya al final no sirvió de nada porque estaba comenzando a dañar la arcilla que intentaba pasar por ella.

No soy muy experta en cuestiones mecánicas, así que le dije a mi esposo que me ayudara revisándola, y decidimos desarmarla, bajo nuestro propio riesgo, claro, pero al final no teníamos nada que perder porque si no lográbamos hacerlo bien, igual ya estaba dañada la pobre.

La falla que comenzó a presentar es que la manivela se trancaba, y al darle con mucha fuerza, hacía «brincar» a los rodillos, marcando la arcilla y haciendo imposible darle un giro completo. Presumí con esos síntomas que se podía haber llenado de restos de arcilla con el pasar del tiempo y por eso se me quedaba trancada, pero cuando la desarmamos nos dimos cuenta que era más grave de lo que pensábamos. El diagnóstico: Uno de los discos de engranaje se dañó. Se rompieron algunos dientes que sirven para encajar con el otro disco, por eso es que se me aislaba al tratar de girarla, y al hacer mucho esfuerzo rompí varios de esos dientecitos 😦

Les dejo aquí algunas fotos del proceso de desarme de la máquina y pronto les doy razón de si logramos repararla o no. Debemos ir el lunes a un sitio donde nos dijeron que podrían arreglar la pieza, pero sin garantías, pues es pequeña 😦 Esperemos que puedan resolverlo. Ya les daré razón en la «parte 2» de esta historia.

La idea de mostrarles las fotos es de, además de contarles mi experiencia, darles tips en el caso de que quieran limpiar las suyas. Les digo de antemano que no tengan miedo, aunque se ve un poco complicado, el sistema es bastante sencillo y limpiarla no debería tomarles mucho tiempo.

En mi caso, yo trabajo con una laminadora de pasta convencional, genérica, que en verdad es el mismo modelo de la Atlas que pueden encontrar bien descrita en muchos sitios en internet. Es muy eficiente y como les digo, fácil de desarmar.

Básicamente me guié con el tutorial cortito que nos muestra la amiga de «Todo Mini» en su blog, pero nos atrevimos a dar un paso más allá y la desarmamos por completo para dar con la falla.

Ok, una vez hecho lo que aparece en el tutorial que les menciono de «Todo mini», pueden tener estas piezas sueltas, que son las planchas que van en la parte de abajo de los rodillos y en las cuales se suele almacenar gran cantidad de arcilla. Como verán, en mi caso estaba fullllllll de los últimos colores con los que trabajé. Pueden limpiarlas con un paño húmedo o toallita de bebé. Yo preferí llevarlas al lavaplatos y darles una buena lavada para que quedaran súper limpias.la foto 2

Ahora, habiendo quitado las planchas, pueden ver sus rodillos expuestos. Aprovechen y límpienlos también con un paño húmedo.la foto 3

Luego de limpiar los rodillos, comenzamos a desarmar la segunda parte de la laminadora. Primero, se debe quitar un «tapón» que tiene el mango de regular las medidas de la máquina, es una especie de tapa. Al retirarla, podrán sacar el tornillo y resorte que ayuda al sistema a graduar las medidas y podrán entonces sacar la perilla por completo. En la siguiente foto podrán ver la pieza sin la tapa y el tornillo y resorte que deben retirar cuidadosamente.la foto 4

Ahora sí, cuando hayas removido toda la perilla podrás ver el sistema de la laminadora expuesto. Allí nos dimos cuenta de que los dientes de los discos estaban «comidos», o rotos, entonces nos dispusimos a seguir desarmándola. Primero, retiramos la pieza larga que está encima de los engranajes sacando los tornillos que lo aseguran y luego halando con un poco de presión. Al hacer esto, se debe retirar una argolla de seguridad que está en el centro de los discos con mucho cuidado, y así podrás sacarlos en caso de que lo necesites.la foto 5

Y bueno, así estaban los discos. Noten que en el primero están algunos dientes quebrados, y en el de atrás no, aunque ya algunas puntas perdieron la forma así que probablemente haya que repararlas también para evitar que se dañen pronto.image

Y bueno. Una vez que el mecánico me logre arreglar las piezas (creo en realidad que debe hacer unas nuevas), les mostraré el proceso de armado y les contaré sobre cómo resultó todo, si me sirve la máquina y si quedó en óptimas condiciones (prendamos las velas y esperemos que sí :P) Por ahora, la pobre está desarmada por el fin de semana, y en terapia intensiva, esperando su «trasplante» de piezas 😛

Y ustedes, ¿han desarmado y limpiado su laminadora? Cuéntanos cómo te fue en la casilla de comentarios y así ayudamos a muchos otros con nuestras experiencias.

Abrazos!